No importa donde mires, si te das una vuelta por cualquier gran ciudad en verano te vas a encontrar a alguien tomándose un Frapuccino.
Para muchos es la bebida del verano y no me extraña. El hielo picado hace resulte de lo más refrescante, por su parte, el café te da la energía que necesitas para continuar y, por último, la leche, el chocolate y la nata aportan el dulzor que te has ganado después de varios meses en plena operación bikini. Aunque lo mejor de todo es, que con esos ingredientes, preparar un Mocha Frapuccino es tan sencillo que lo puedes hacer tú mismo en casa.
Café, hielo…
De hecho, es tan sencillo de preparar que una vez tengas los siguientes ingredientes preparados tienes casi todo el trabajo hecho:
- Café expreso (a temperatura ambiente).
- Hielo.
- Sirope de chocolate.
- Azúcar.
- Leche.
- 200ml de nata para montar (muy fría).
[blue_box]Si no quieres montar la nata también puedes comprarla, aunque su sabor y textura no tienen nada que ver.[/blue_box]
También nos hará falta una batidora de mano (si vamos a montar la nata) y una batidora de vaso (o licuadora).
Batir y listo

Una vez tengamos todo listo, y salvo que hayamos comprado ya montada, lo primero es preparar la nata:
- Vertimos 200 ml de nata para montar bien fría en un cuenco grande y lo batimos a baja velocidad con la batidora de mano. Una vez empiece a espesarse subimos la velocidad.
- Cuando la nata esté casi montada añadimos 3 cucharadas soperas de azúcar y batimos hasta que se termine de montar.
Una vez esté lista la nata, preparar el Mocha Frapuccino es muy sencillo:
- Usando el vaso en el que lo vayamos a servir como referencia, echamos 1 vaso de hielo, 1/3 de café expreso, 1/3 de leche, una cucharada de sirope de chocolate y otra de azúcar en la licuadora y batimos durante unos 30 segundos.
- Una vez esté listo sólo tenemos que servirlo en el vaso, añadir la nata por encima y decorarlo con algo de sirope de chocolate, canela o pepitas de chocolate.
Ya solo te queda sacarle una foto para dar envidia a tus seguidores de Instagram y disfrutar de él mientras lees el último libro de Harry Potter. Ya habrá otros días para cuidarse.